Semana del Ibex con pocos cambios, aunque con un dato importante. La caída del jueves no ha tenido continuidad.
Cuando esto ocurre, suele suceder todo lo contrario, es decir, subidas próximas.
El Ibex sigue sin superar los 11.000, pero da la impresión de que se encuentra muy cómodo en la zona de los 10.700.
Con todos los frentes que hay abiertos: Libia, Japón, Portugal, posible subida de tipos en la zona Euro, etc. Parece un milagro que no hayamos caído. Cuando esto pasa da la impresión de que solo queda un camino posible. En el momento en que las noticias no sean tan malas subiremos.
Lo que hay que tener en cuenta es a las empresas que hay detrás del Ibex. Nos damos cuenta de que las más importantes sacan más beneficios de otros países que de España, y además ofrecen una rentabilidad por dividendo imposible de encontrar en otros activos.
Si a esto le añadimos que el Ibex está a niveles de hace 10 años, cuando el PIB es muy superior, tenemos el coctel perfecto para que, a poco que mejore el país, hayan subidas espectaculares de la bolsa Española.
Técnicamente, hasta que no superemos el 11.000 habría que estar a resguardo, pero si lo superamos no puede haber excusas para no invertir fuertemente.
En valores concretos, BME es el que sigue más fuerte con una subida el viernes importante y con volumen.
El resto sigue un poco igual, consolidando a la espera de que el Ibex diga que "toca" romper todas las resistencias.
Destaca ACS, que tras tres meses de corrección, vuelve a dar síntomas de subir bien.
En nuestro sistema de especulación seguimos esperando a ver la ocasión clara. Dicen que la paciencia es una gran virtud.
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